Washington, D.C., abril 2025 — Una fuerte discusión entre Elon Musk y John Bessent, secretario del Tesoro designado por el presidente Donald Trump, acaparó la atención mediática esta semana luego de que, según testigos, ambos estuvieron a punto de llegar a los golpes durante una reunión privada en la Casa Blanca.
El enfrentamiento, reportado originalmente por el New York Times, se habría originado por el nombramiento del nuevo director del Servicio de Impuestos Internos (IRS, por sus siglas en inglés). Musk recomendó al comisionado interino Gary Shapley sin consultar a Bessent, quien posteriormente revirtió la decisión y colocó a su propio candidato, Michael Faulkender.
“Fue una escena bastante ruidosa”, relató uno de los asistentes al medio estadounidense, destacando que un miembro del equipo se vio obligado a intervenir para evitar una confrontación física.
Desde la Casa Blanca, la secretaria de prensa Karoline Leavitt minimizó el incidente, calificándolo como parte de “un proceso de debate saludable” entre el gabinete y los asesores del presidente.
A raíz del altercado, Musk anunció que reducirá gradualmente su participación como asesor gubernamental. “Probablemente a partir del próximo mes, en mayo, mi tiempo dedicado a DOGE disminuirá significativamente”, dijo en una conferencia reciente de Tesla, refiriéndose a su papel dentro del Departamento de Oportunidades Gubernamentales y Económicas (DOGE).
El presidente Trump, al ser cuestionado por la prensa, aseguró que su salida parcial no lo tomó por sorpresa. “Esperábamos que lo hiciera para esta época”, expresó, y añadió que en su opinión, Musk ha realizado un buen trabajo y ha generado ahorros significativos para el gobierno.
El incidente refleja tensiones internas en el gabinete presidencial, en un contexto político cada vez más polarizado y con implicaciones importantes para las decisiones estratégicas del gobierno estadounidense.
